Júlia se acababa de tragar un trozo de panettone rebañado en chocolate y llevaba un churrete en la mejilla. Llorenc le dio un beso y se lamió los labios. —¡Eres una repelente! Ahora mismo te imagino con el uniforme, yendo a la escuela, …
Fuente: Isola Bella Autora:Crusafont, Anna
Los churretes son un clásico en las caras de los niños. Son tan inherentes a ellos como su felicidad o inocencia. Quizá en Argentina, Guatemala o Costa Rica no se diga mucho este término, no lo sé, pero en Sevilla es un clásico.
El churrete es una mancha sobre el cuerpo humano, especialmente en la cara o en las manos. El origen de esta voz es otra palabra del diccionario: churre, que es el pringue o la suciedad.